Éxito Noticias, 1 de agosto 2025.- Un nuevo incendio forestal ha encendido las alarmas en Tarija. Dos focos de fuego se registraron este jueves en la Serranía de Sama, una reserva ecológica vital para el suministro de agua y biodiversidad en el valle central. La emergencia ha dejado, hasta ahora, tres personas heridas, una de ellas en terapia intensiva, y más de 80 hectáreas consumidas por las llamas.
Las primeras llamas se reportaron en la zona de Coimata, municipio de San Lorenzo, y lograron ser controladas en pocas horas. Sin embargo, el segundo foco, originado en el Rincón de La Vitoria, municipio de Cercado, se convirtió en una amenaza mayor. Las ráfagas de viento y la vegetación seca permitieron que el fuego se expandiera con rapidez hacia Turumayo.
Según el director de Gestión Ambiental de la Gobernación, Reiner Figueroa, en varios sectores las llamas alcanzaron hasta cinco metros de altura. “Estamos hablando de una zona accidentada, con mucho material seco y fuertes vientos”, explicó.
Frente a esta situación, la Gobernación solicitó apoyo aéreo al Viceministerio de Defensa Civil. Se prevé que un helicóptero se sume a las tareas de sofocación este viernes, utilizando como base de carguío la represa de San Jacinto.
En tierra, cerca de 300 personas, entre bomberos, brigadistas, voluntarios y efectivos militares, fueron desplegadas en la zona. Además, se instalaron ambulancias y puntos de atención médica para atender posibles casos de intoxicación por humo y deshidratación. El municipio de Tarija declaró emergencia municipal.
El alcalde Johnny Torres informó que el fuego se habría originado por la quema de basura, aunque se registraron también chaqueos simultáneos en otras zonas, pese a las alertas por vientos. “Esto pone en riesgo a más de tres comunidades rurales”, advirtió. Además, anunció la llegada de bomberos voluntarios desde Santa Cruz y pidió a la población no acercarse a las zonas afectadas.
Las consecuencias humanas ya son graves: tres personas resultaron heridas, entre ellas un hombre de 57 años que permanece en terapia intensiva por quemaduras severas. El fuego también arrasó con forraje para animales y puso en peligro viviendas rurales, afectando directamente la economía de familias campesinas.
La imagen de las laderas de Sama en llamas, visible desde la ciudad de Tarija, evocó la tragedia de 2017, cuando un incendio forestal destruyó 13.000 hectáreas en la misma zona. Ambientalistas advierten que, pese a las experiencias pasadas, aún no existen medidas efectivas de prevención ni sanciones ejemplares contra quienes provocan estos siniestros.
La Fiscalía Departamental ha iniciado una investigación de oficio para identificar a los responsables. Mientras tanto, la población observa con preocupación cómo el fuego amenaza nuevamente a uno de los patrimonios naturales más importantes de la región.


