Éxito Noticias, 9 de septiembre 2025.- El exministro de Gobierno, Arturo Murillo, regresó voluntariamente a Bolivia tras cumplir una condena en Estados Unidos por delitos de lavado de dinero y sobornos relacionados con la compra de gases lacrimógenos, según señaló su abogado, Jaime Tapia, en contacto con radio Éxito.
“Cuando terminó su condena injusta en Estados Unidos, tenía la chance de haberse quedado allá en Estados Unidos pero él prefirió ser trasladado a Bolivia a afrontar los cargos que pesan en su contra”, señaló Tapia.
En Bolivia, Murillo enfrenta actualmente detención preventiva en el penal de San Pedro, en La Paz, en dos procesos: uno por la compra con sobreprecio de material antidisturbios conocida como “Gases Brasil” y otro por la contratación de catering para unidades especiales del Chapare y los Yungas. Según el abogado, se le habrían abierto 15 procesos penales, de los cuales seis han sido notificados formalmente, y en dos de ellos ya se decretó detención preventiva.
“A Arturo Murillo le han abierto una batería de procesos penales, en una totalidad según información gubernamental que alcanzaría los 15 procesos penales, de los cuales tenemos conocimiento de que fueron seis notificados, en dos procesos ya se ha determinado detención preventiva”, agregó.
Tapia enfatizó que, mientras se resuelvan los recursos de apelación, las sentencias en Bolivia aún no tienen firmeza. “Las medidas cautelares actuales, como la detención preventiva, buscan garantizar la presencia de Murillo en los procesos, pero no implican que las sentencias estén ejecutoriadas”, aclaró.
Sobre su situación personal, el abogado explicó que Murillo no tiene domicilio ni bienes disponibles en Bolivia y que la cárcel de San Pedro representa su único lugar para residir. Por razones de seguridad, se han limitado las visitas familiares. A pesar de estas condiciones, Tapia aseguró que el exministro mantiene firmeza y determinación para asumir su defensa.
“No tiene dónde vivir, la única opción de vivienda que él tiene es el penal de San Pedro, no tiene otro lugar, otro techo para dormir, las condiciones en las que ha quedado Arturo Murillo son muy dramáticas, no tiene chance de recibir ni siquiera familiares porque hay un alto temor de que ellos sean perseguidos también y se ha tomado la decisión de evitar este tipo de visitas. Anímicamente yo lo veo muy determinado en asumir su defensa, asumir todas las implicancias de esto, no veo una persona que esté quebrada ni deprimida a la situación que ha sido puesta”, remarcó.
El abogado también defendió la condena estadounidense, calificándola de “injusta”, y subrayó que Murillo está dispuesto a enfrentar las implicancias legales de todos los procesos pendientes en Bolivia, utilizando todos los recursos legales disponibles para garantizar un juicio justo.
El abogado aseguró que recurrirán a todos los medios de defensa que la ley permite y que continuarán apelando las detenciones preventivas y cualquier sentencia que pudiera ejecutarse en Bolivia, hasta que se resuelvan todos los recursos legales pendientes.