Éxito Noticias, 23 de septiembre 2024.- El ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño, expresó su preocupación por la marcha encabezada por Evo Morales, señalando que el exmandatario parece tener la intención de generar situaciones de riesgo que podrían resultar en víctimas fatales. Según Montaño, el avance de la marcha hacia La Paz ha desmentido las afirmaciones de Morales sobre la situación del país.
“Esta marcha es de la muerte. En Ventilla, sus grupos de choque han venido a sembrar el terror y eso demuestra que el señor Evo Morales ha venido a instaurar un golpe de Estado a La Paz; (…) Aquí los paceños no lo quieren, aquí no lo van a aguantar. (…) Le pedimos a la ciudadanía que esté tranquila porque nuestro gobierno ha hecho la invitación al diálogo”, señaló Montaño.
Agregó que “ellos (la marcha evista) quieren muertos, ellos quieren que se derrame sangre y ellos quieren bañarse con aquello pero no se les ha dado ninguna oportunidad siquiera. (…) Se cayó la mentira de Evo Morales porque está marchando con toda tranquilidad”.
En el contexto de esta movilización, Montaño reafirmó su compromiso con el presidente Luis Arce de garantizar la seguridad de los ciudadanos y su derecho a desplazarse sin temor. El ministro subrayó que la llegada de los marchistas podría revelar la violencia que ellos traen consigo.
Señaló que los manifestantes tienen una agenda oculta, donde la violencia podría ser utilizada como una herramienta para lograr sus objetivos. Mientras Morales argumenta que la protesta se centra en la crisis económica, los organizadores también han admitido que buscan reconocimiento para su candidatura en el próximo congreso del MAS, en un intento de posicionar a Morales como el único candidato para las elecciones de 2025.
Montaño criticó la ambición del exmandatario, sugiriendo que la marcha no solucionará los problemas económicos del país. Enfatizó que el verdadero propósito de la movilización parece ser la habilitación de la candidatura de Morales ante el Tribunal Supremo Electoral, algo que la Constitución boliviana prohíbe.