Éxito Noticias, 20 de marzo 2025.- El expresidente de la Cámara de Diputados, Víctor Borda, aseguró que su renuncia en noviembre de 2019 no fue voluntaria, sino producto de amenazas y coerción. Sus declaraciones se dieron este jueves ante el Tribunal de Sentencia, en el marco del juicio del caso Golpe de Estado I.
Borda relató que el 10 de noviembre de 2019 su casa fue incendiada y su hermano tomado como rehén, lo que lo obligó a dimitir.
El exlegislador también sostuvo que él representaba “el último eslabón constitucional” y que la salida del entonces presidente Evo Morales y del vicepresidente Álvaro García Linera se dio en un contexto de presión extrema.
“He declarado que mi renuncia no ha obedecido a mi criterio de voluntariedad sino ha sido coercitivo, han tomado de rehén a mi hermano, han tomado mi casa el 10 de noviembre de 2019 y eso es lo que he manifestado ante el Tribunal”, señaló el exlegislador.
Por su parte, Marco Antonio Borda, hermano del exparlamentario también testificó ante el Tribunal indicando que en 2019 ingresaron a su vivienda, lo maniataron e incendiaron el inmueble para presionar la renuncia de Víctor Borda, según él, por órdenes de Marco Antonio Pumari.
