Éxito Noticias, 25 de marzo 2025.- La situación en el departamento de Beni continúa siendo grave luego de que se emitiera la declaratoria de desastre departamental debido a las intensas lluvias que han afectado la región. En contacto con radio Éxito, Wilson Ávila, director del Centro de Operaciones de Emergencia Departamental (COED), dio detalles alarmantes sobre las consecuencias que enfrenta la población y las medidas urgentes que se requieren para atender la emergencia.
Ávila explicó que la Gobernación del Beni, ante la falta de recursos económicos suficientes, se vio obligada a emitir el decreto de desastre para poder recibir ayuda del Gobierno nacional. Según el director del COED, del 100% del presupuesto destinado al departamento, solo se ha recibido el 60% en liquidez, mientras que el 40% restante nunca ha llegado.
“Ese poco dinero no es suficiente para un departamento tan grande. Por eso, se tomó la decisión de emitir este decreto para que el Gobierno pueda ayudarnos con alimentos, porque el pueblo está sufriendo hambre, especialmente los más humildes”, afirmó Ávila.
Además de la crisis alimentaria, la situación sanitaria también es crítica. “La gente está tomando agua contaminada y está sufriendo graves problemas de salud, como dolores de estómago, diarrea, fiebre, sarna, hongos y enfermedades respiratorias”, detalló. La falta de medicamentos y atención médica ha intensificado el sufrimiento de la población, especialmente en las zonas más alejadas de la capital.
Ávila también advirtió sobre el inminente desbordamiento del río Gran Mamoré, cuyo golpe de agua ya está afectando a varios municipios. “Estamos esperando que esta noche el río pueda rebalsar y esto va a tener impacto en otros municipios. Las lluvias fuertes pronosticadas para los próximos días empeoran aún más la situación”, explicó.
La crisis no solo se limita a las necesidades inmediatas de la población, sino que también pone en riesgo la producción agrícola de la región. “Los cultivos de yuca, arroz, frijol y hortalizas se han perdido. Necesitamos semillas para poder reactivar la agricultura y asegurar la alimentación futura de la población”, añadió Ávila.
Ante esta grave situación, el director del COED hizo un llamado a la solidaridad de los bolivianos y de organizaciones no gubernamentales (ONG) para que se unan a los esfuerzos de ayuda humanitaria. “Necesitamos recursos para la atención de las familias afectadas, para brindarles alimentos, medicinas y asistencia en salud, así como para la reactivación de la agricultura”, subrayó.