Éxito Noticias, 16 de febrero 2025.- El líder indígena Francisco Marupa (67 años) fue asesinado y el autor confeso es Julio L. T. (20 años). El móvil fueron “problemas personales con la víctima”, lo que descarta sea consecuencia de ajuste de cuentas vinculados a la defensa del territorio indígena y el medioambiente, informó el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo.
La tarde del sábado fue aprehendido el confeso autor de la muerte del activista de la comunidad de Torewa, perteneciente a la Central Indígena del Pueblo Leco de Apolo (Cpilap), norte de La Paz.
“La Policía Boliviana aprehendió a Julio L. T. de 20 años quien reconoció ser el autor del asesinato porque tenía problemas personales con la víctima, por lo que, se descarta muerte por ajuste de cuentas, temas territoriales o minería ilegal, como se especuló”, afirmó Del Castillo en un post en sus cuentas en redes sociales.
El cuerpo sin vida de Marupa fue encontrado el viernes 14 de febrero en la comunidad Torewa, provincia Abel Iturralde, luego de haber sido reportado como desaparecido dos días antes.
“El levantamiento del cuerpo sin vida fue con el apoyo de la Armada Boliviana debido a que la Policía tuvo que trasladarse vía fluvial y posteriormente en carretera”, explicó el ministro.
El cuerpo de la víctima y el aprehendido fueron trasladados a San Buenaventura.
“Mediante la autopsia médico-legal se ha llegado a conocer que la causa de la muerte es por TEC (traumatismo craneoencefálico) grave y shock hipovolémico. Esto habría acontecido a través de un golpe contuso. De ahí que ya el caso ha sido puesto a conocimiento del Ministerio Público”, informó el comandante Departamental de Policía La Paz, Gunther Agudo.
Por las indagaciones preliminares se conoce que días antes del crimen, el acusado de asesinato habría sido sorprendido robando en la habitación de la víctima.
Este episodio se volvió a repetir el martes 11 de febrero en las plantaciones de banano de la víctima. “De ahí que se presume que habría habido un incidente entre esas dos personas, lo que habría ocasionado la muerte”, adelantó.
La muerte del líder indígena motivó un pronunciamiento de la Unión Europea (UE), porque se la atribuía a represalias por su defensa del territorio indígena y la biodiversidad del Parque Nacional Madidi.