Éxito Noticias, 16 de diciembre 2025.- La vicepresidenta del Movimiento al Socialismo (MAS) y exministra, Julia Ramos, rechazó las acusaciones que la vinculan con presuntos desvíos de recursos del Fondo Indígena y aseguró que está dispuesta a presentarse ante cualquier citación del Ministerio Público para aclarar su situación. En una entrevista con radio Éxito, afirmó que desde hace más de 11 años enfrenta un proceso marcado, según dijo, por la denigración, los insultos y la estigmatización, particularmente hacia mujeres campesinas e indígenas.
Ramos cuestionó las versiones que señalan que habría recibido más de Bs 3 millones en cuentas personales y desafió públicamente a sus denunciantes a presentar pruebas documentadas y bancarias en un plazo de 48 horas.
“No es nomás denigrar a las mujeres por ser de pollera o por ser indígenas originarias. Tienen que demostrar con documentos y cuentas bancarias”, sostuvo. Aseguró que nunca se dio a la fuga, que permanece en el país y que viaja constantemente a La Paz para realizar seguimiento a su caso.
La exautoridad recordó que en 2015 fue detenida preventivamente y posteriormente sometida a detención domiciliaria, cumpliendo medidas como la firma periódica ante autoridades judiciales. Señaló que presentó todos sus descargos y que actualmente cuenta con resoluciones de sobreseimiento, por lo que considera injusto que el caso vuelva a ser utilizado con fines políticos. “Cuando uno nada hace, nada teme”, manifestó.
Sobre el funcionamiento del Fondo Indígena, Ramos explicó que formó parte del directorio como vocal a partir de 2010 y detalló que la aprobación de proyectos seguía al menos 15 pasos, desde la decisión en las comunidades hasta la revisión técnica e institucional en distintas instancias del Estado. Negó que los recursos se entregaran de forma directa o discrecional y afirmó que los desembolsos se realizaban de manera gradual, no por montos totales.
Ramos también rechazó que se le atribuya responsabilidad directa sobre la ejecución o administración de proyectos, señalando que no era representante legal ni responsable del control social o financiero. En ese marco, lamentó que, según su criterio, se intente responsabilizar únicamente a dirigentes campesinos e indígenas, mientras no se visibiliza el rol de técnicos y representantes ministeriales que también formaban parte del directorio.
Respecto a la aprehensión del expresidente Luis Arce por el caso Fondo Indígena, evitó emitir juicios de fondo y aclaró que, como ministro de Economía, no participaba directamente en las sesiones del directorio, sino a través de delegados técnicos. Añadió que serán las investigaciones las que determinen responsabilidades y consideró necesario que se convoque a todos los actores involucrados, incluidos técnicos y exautoridades, además del expresidente Evo Morales.
Asimismo, Julia Ramos ratificó que no abandonará el país y que asistirá a cualquier convocatoria judicial. Insistió en la necesidad de que el proceso avance con transparencia, objetividad y sin campañas de desprestigio.
