Éxito Noticias, 17 de agosto 2025.- El Defensor del Pueblo, Pedro Callisaya, destacó la vocación democrática de las y los bolivianos al concluir la jornada de las Elecciones Nacionales 2025, en la que el Centro de Monitoreo de Derechos Humanos reportó 423 casos, seis conflictos y siete hechos de intolerancia.
“Felicito la vocación democrática de la población boliviana que hoy demostró confianza y compromiso con la democracia al asistir masivamente a los recintos electorales. También quiero resaltar el rol de las misiones internacionales que llegaron para dar mayor transparencia a la jornada. Podemos afirmar que fue una jornada desarrollada con normalidad”, expresó el Defensor.
Callisaya subrayó que, por primera vez, la Defensoría del Pueblo activó un Centro de Monitoreo conformado por 700 voluntarios y 200 servidores defensoriales, quienes realizaron visitas a 900 recintos electorales en todo el país.
En ese marco, informó que las denuncias de vulneración de derechos humanos relacionadas al proceso electoral alcanzaron a 423 casos, de las cuales se logró subsanar un 57,5%. El departamento de La Paz, concentró la mayor cantidad de casos (163), seguido de Oruro (95) y Beni (63). Entre las principales denuncias se identificaron: dificultades para la emisión de certificados de impedimento (118), problemas en el voto preferente (66), ausencia de puntos de información (44), mesas de sufragio no habilitadas en el horario establecido (34) y ciudadanos depurados de las listas electorales (26).
“Nos llama la atención que el 68% de jurados presidentes de mesa fueron varones y el 32% mujeres; además, un 5% no recibió capacitación previa. En cuanto a la participación de organizaciones políticas, constatamos que en al menos el 60% de las mesas monitoreadas se contó con la presencia de delegados de partidos. El informe completo del monitoreo será presentado en los próximos días”, agregó Callisaya.
Asimismo, precisó que se registraron seis conflictos: tres en el municipio de Entre Ríos (Cochabamba), uno en Puerto Villarroel (Cochabamba), uno en Santa Cruz de la Sierra y uno en la ciudad de La Paz. Del mismo modo, se contabilizaron siete casos de discriminación e intolerancia, con mayor recurrencia en el Chapare (Cochabamba) y en Santa Cruz de la Sierra.