Éxito Noticias, 26 de julio 2024.- La tensión entre las diferentes ramas del gobierno boliviano ha alcanzado un nuevo nivel tras la reciente confrontación entre el presidente Luis Arce y el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez. La discordia se centra en la aprobación de importantes créditos internacionales que, según Arce, están siendo obstaculizados por la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP).
En un mensaje presidencial transmitido la noche del jueves, Luis Arce exigió a la ALP que dejara de “estrangular la economía” del país y aprobara más de 100 millones de dólares en créditos que, según él, están estancados en la Asamblea. “Para que podamos afrontar de mayor manera esta coyuntura necesitamos que ese grupo de diputados y senadores que tienen un pacto en la Asamblea, que piensan más en intereses políticos particulares, dejen de estrangular la economía y aprueben los más de mil millones de dólares bloqueados”, afirmó Arce en su contundente discurso.
La respuesta de Rodríguez no se hizo esperar. A través de un comunicado, el presidente del Senado rechazó las acusaciones del presidente y defendió el trabajo de la ALP. “Hermano Presidente, usted responsabiliza a la ALP por la crisis económica, acusación que no tiene sustento. Más bien, le solicito respetuosamente que promulgue la Ley 079 crédito de $us 176 millones sancionada en la 7ma sesión de la ALP, que está pendiente en su despacho”, declaró Rodríguez, poniendo en evidencia que ciertos proyectos de ley ya han sido aprobados por el Senado y están a la espera de la promulgación presidencial.
Rodríguez también mencionó el crédito de 15 mil millones de yenes, que fue aplazado en la ALP y solicitó al vicepresidente convocar a una sesión para tratar este proyecto de ley. “En la Cámara de Senadores ya sancionamos más de 30 proyectos de ley en materia de créditos y, al momento, sólo tenemos pendiente dos créditos en el plazo correspondiente. El resto de las normas de créditos se encuentran en Diputados”, agregó Rodríguez.
El presidente del Senado subrayó el compromiso constante de su cámara con las leyes que benefician al pueblo boliviano, sugiriendo que la responsabilidad de los retrasos en la aprobación de los créditos no recae en el Senado.